Gracias a La Caixa por contar con CAEB para éste y otros eventos. Nos sentimos muy cómodos trabajando y colaborando estrechamente con La Caixa, siempre en beneficio de las empresas y sus trabajadores, especialmente éstos últimos, sin duda el pilar de cada compañía u organización.
Las palabras que inspiran la actual trayectoria de CAEB y que reflejan los valores que impulsamos desde mi llegada a la presidencia en 2014 son:
PERSONAS,
IDEAS,
OPORTUNIDADES
y FUTURO.
En CAEB, creemos en las personas. Con CEOE y Fundación “la Caixa” compartimos la premisa de que el capital humano es el principal activo de las organizaciones y, como tal, debemos prestarle la atención necesaria. Porque, como siempre decimos: si las personas están bien, las empresas funcionan bien.
Y no es algo que nos inventemos o que lo digamos nosotros. Son muchos los estudios que demuestran que las organizaciones que dirigen su gestión hacia la excelencia y hacia el concepto de “empresa saludable”, con una gestión integral de la salud física, emocional y mental de las personas trabajadoras, se convierten en organizaciones más competitivas y sostenibles.
La salud y el bienestar, que constituyen uno de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 de Naciones Unidas, concretamente el nº 3, han tomado especial relevancia a partir de la pandemia de la Covid-19 y de los efectos que ésta ha tenido, no sólo sobre la salud física, sino también sobre la salud mental y emocional de las personas.
Hoy hemos firmado con Fundación CEOE y con Fundación “la Caixa” el acuerdo del “Plan Sumamos. Salud + Economía”, un convenio de colaboración para favorecer la inclusión laboral de los colectivos en situación de vulnerabilidad en Baleares.
Sin embargo, la alianza de CAEB con Fundación “la Caixa” y con el programa ‘Incorpora’ no es nueva. Nuestra colaboración se inició en junio de 2016 con la creación del Fórum “Responsabilidad Social y Competitividad”, una plataforma destinada a impulsar modelos responsables de gestión empresarial, que velen tanto por la competitividad de las empresas y crecimiento de la economía como por el desarrollo de las personas, fomentando que organizaciones de todos los tamaños y sectores emprendan acciones en relación a los distintos grupos de interés, entre ellos:
usuarios,
consumidores y clientes,
empleados,
proveedores,
medio ambiente,
poderes públicos
y sociedad en general.
Entre las acciones que hemos llevado a cabo destacan varias ediciones del Congreso de Responsabilidad Social y Competitividad, en este mismo salón de actos de Caixaforum y, en especial, la creación del programa ‘CAEB Facilita’, una iniciativa a través de la que perseguíamos favorecer el acceso al empleo a las personas más desfavorecidas o en riesgo de exclusión social, trabajando conjuntamente con las entidades sociales de Baleares, como es el caso de INCORPORA.
A través de CAEB FACILITA hacemos de nexo de unión entre el sector empresarial y el tercer sector para ofrecer oportunidades laborales a las personas en situación vulnerable, como:
Mayores de 45 años
Desempleados de larga duración
Personas con discapacidad física, intelectual o por razones de salud mental
Jóvenes en riesgo de exclusión social
Personas con adicciones
Personas dependientes, víctimas de accidentes, enfermos y sus familias
Personas con dificultades específicas de aprendizaje (DEA)
O víctimas de violencia de género
Con ‘Incorpora’ de Fundación “la Caixa” hemos desarrollado diversas acciones en este sentido y seguiremos caminando juntos, uniendo fuerzas. Porque creemos que es importante implicar a las empresas, que se involucren en cualquiera de nuestros proyectos de acción social y también poner en valor su esfuerzo, reconocerlo públicamente y darles visibilidad y difusión con un fin ejemplarizante y para motivar a muchas otras a iniciar este camino.
Por ello, a través de nuestra Red de Empresas Comprometidas, que está conformada por todas aquellas organizaciones que demuestran creer en las personas y que trabajan por un mundo cada vez mejor y más justo, tratamos de contagiar de este espíritu social a muchas más empresas.
Desde la patronal creemos que, independientemente del tamaño, actividad y recursos de cada empresa, todos, todos, podemos poner nuestro pequeño granito de arena. Pero no sólo hemos puesto la mirada en los colectivos vulnerables. Como os decía, las personas constituyen el principal valor de las empresas y una clara ventaja competitiva y, por tanto, las organizaciones empresariales debemos implicarnos activamente en la generación de una cultura de salud global en nuestros equipos de trabajo. Incluso podemos ir más allá fomentando que las políticas de promoción de la salud en el trabajo adquieran un relevante papel dentro de las estrategias corporativas.
La salud y bienestar, que como decía constituye el Objetivo de Desarrollo Sostenible nº3 de la Agenda 2030 de Naciones Unidas. Las empresas que se ocupan del bienestar de sus equipos son empresas más productivas y más competitivas. Las estrategias corporativas avanzadas, que integran la gestión de la salud física, emocional y mental de los trabajadores consiguen reducir la accidentabilidad, las enfermedades y el absentismo.
Además, también logran:
mejorar el clima laboral
la motivación y participación
retener el talento
aumentar la productividad
y generar confianza en los diversos grupos de interés
Os invito a todos a que incorporemos en nuestras políticas de gestión de personas, aquellas medidas y acciones que contribuyan a incrementar la salud de nuestros equipos. Se trata, sin duda, de la mejor forma de fidelizar a nuestras plantillas, de retener el talento que nos rodea en un momento donde no dejamos de escuchar la generalizada falta de mano de obra cualificada, uno de los problemas más importantes a los que se enfrenta el mercado laboral. Es un problema que arrastramos desde hace años en Baleares y que se ha disparado este 2022 tras la pandemia, pero que también es común a muchas regiones del conjunto de España.
La falta de trabajadores o la fuga de éstos equivale a pérdida de productividad en las pequeñas y medianas empresas, lo que pone en riesgo la viabilidad y supervivencia de muchas empresas. Nos encontramos, pues, ante un verdadero quebradero de cabeza que requiere de dos líneas de actuación:
Una clara y decidida apuesta por la formación, tanto de los jóvenes que buscan su entrada en el mercado laboral como de los profesionales que quieren mejorar o actualizar sus conocimientos
Y la continuidad y ampliación de programas como el de Facilita o Incorpora o Facilita de la Fundación “la Caixa”, que integramos y seguiremos defendiendo desde CAEB, ahora de la mano de la Fundación CEOE.
Director General del Hotel Kimpton Aysla Mallorca, Alejandro Bautista,
Empresarios, amigas y amigos
Gracias en primer lugar por la invitación a participar en esta interesante jornada.
Es para mí un honor y a la vez una responsabilidad clausurar siempre actos de este tipo, especialmente cuando todos estamos ya a la expectativa de lo que nos puede deparar la temporada turística 2023. Acabamos de cerrar (o lo estamos haciendo aún en según qué destinos de nuestras Islas), una temporada que volvemos a considerar normal, tras dos años de dura pandemia. Una temporada positiva, en la que hemos vuelto a hablar de las cuestiones y/o problemas propios del sector Servicios, del turismo, el motor de la economía balear.
El ejercicio 2022 nos deja un sabor agridulce porque, por una parte, hemos recuperado el volumen de visitantes y de actividad que teníamos antes de la pandemia, en 2019; pero, por otro lado, la rentabilidad de las empresas se ha visto muy mermada por los sobrecostes derivados de:
una inflación que no sufríamos desde hace varias décadas
y por la guerra en Ucrania que también lo ha encarecido todo, además de retrasar la llegada de muchos materiales y/o suministros.
En Baleares, a pesar del regreso de una temporada normalizada y del crecimiento económico, seguimos con un nivel de PIB inferior al de 2019. Un agujero, el que nos dejó la pandemia, que probablemente acabemos de enjuagarlo durante 2023… si no hay nuevos contratiempos.
En estos momentos, tanto la Comisión Europea como informes nacionales, como el último de Caixabank, han reducido el crecimiento español al 1% el año que viene, la mitad de la previsión del Gobierno, cuya última actualización situaba el crecimiento en el 2,1% para 2023. En Baleares, dada nuestra singularidad económica, es muy posible que sorteemos mejor la desaceleración que ya es evidente en las principales potencias europeas y que puede acabar afectando a España.
No obstante, los próximos dos trimestres, hasta que la temporada que viene vuelva a estar plenamente operativa, estarán marcados por la incertidumbre.
Los balances de las empresas, como decía al inicio de mi intervención, no reflejan el movimiento turístico que hemos tenido esta temporada y, por tanto, los empresarios miran con recelo los meses de invierno, donde también se deben ir ultimando diferentes convenios colectivos. Encima de la mesa tenemos las peticiones sindicales de subidas ligadas a la inflación, algo que es totalmente inviable porque la mayoría de las empresas no podrían soportarlo. Lo saben los sindicatos y lo sabe el Gobierno, que ha aplicado una subida a los funcionarios acorde con los convenios que ya se han firmado en diferentes sectores y que están muy lejos de las pretensiones sindicales.
En este sentido, desde la patronal balear, al igual que a nivel nacional desde CEOE y Cepyme donde estamos representados, pedimos responsabilidad a las autoridades políticas, que huyan de los grandes titulares, acentuados por esta época preelectoral, y que sean consecuentes con la realidad empresarial y con lo que predican. Los empresarios necesitamos seguridad jurídica, certidumbre para poder trabajar, planificar a medio y largo plazo y, por supuesto, ofrecer a los trabajadores las mejores condiciones posibles, siempre dejando claro que la viabilidad de las empresas no se puede poner en peligro. Si una empresa no es viable, se ve abocada al cierre y, si cierra, ya no hay salarios que valgan.
Entre los retos que tenemos por delante, el tejido empresarial de Baleares debe hacer frente a varios problemas que hemos padecido la presente temporada:
La falta de mano de obra, un problema generalizado en todos los sectores y cuya solución pasa por la formación. Retener nuestro talento y fidelizar a los trabajadores pasa por formar personal más y mejor cualificado. A la falta de mano de obra se le añade el absentismo, que en Baleares se ha disparado hasta el 9% este 2022, como conocimos durante una jornada ayer en CAEB. El absentismo merma la productividad empresarial y, en tiempos de crisis o desaceleración, como el actual, suele seguir al alza.
En segundo lugar, es imprescindible buscar soluciones a los problemas de movilidad que hemos padecido esta temporada, que afecta tanto a la imagen que damos como destino como al día a día de los residentes. Las colas en puertos y aeropuertos, las retenciones constantes, los problemas de aparcamiento… deben plantearse ahora, no esperar a la llegada de la nueva temporada.
En tercer lugar, la inflación, la falta de suministros y el encarecimiento y retraso de muchos productos que han mermado mucho la rentabilidad empresarial. Aunque no está en nuestra mano, es un obstáculo mayúsculo que esperamos que se vaya suavizando en los próximos meses.
Por último, tenemos un grave problema de vivienda, como bien sabéis muchos de los que hoy nos acompañáis. Un problema que no se debe al inversor o residente extranjero, sino que es mucho más profundo, se ha ido agravando los últimos años y debe atajarse con urgencia.
Como desde hace años en Ibiza, ahora también en Mallorca padecemos ya una alarmante falta de vivienda, que no sólo nos perjudica a los residentes a la hora de encontrar pisos dignos a precios asequibles, sino que además pone en riesgo la llegada de médicos, policías, administrativos del Estado, etc. que no encuentran viviendas para instalarse en nuestra Comunidad.
Son, sin duda, algunos de los grandes interrogantes de cara al 2023, los que tenemos que poner encima de la mesa en los diferentes foros ahora, en estos meses de temporada baja. Porque si en algo estamos todos de acuerdo es que el turismo ha cambiado, que la pandemia que nos ha azotado los dos últimos años ha acelerado una transformación turística ineludible, y que ahora debemos afrontar en un contexto global donde las ganas de viajar y de conocer Mundo no sólo han vuelto a niveles precrisis, sino que incluso los han superado.
En Baleares hemos vuelto a poner en valor nuestro destino dentro y fuera de nuestras fronteras, nuestras playas, nuestros hoteles, también nuestros restaurantes y pueblos. En definitiva, todo aquello que nos convierte en un destino de primer nivel como el que somos, y nos reconocen internacionalmente.
Desde CAEB consideramos y defendemos que la transformación de la que estamos hablando pasa por cambiar volumen por valor, SÍ,como ya se está produciendo en algunos rincones de las Islas donde las inversiones hoteleras y las apuestas de algunos municipios, como aquí en Calvià, van encaminadas hacia ese otro turismo de mayor poder adquisitivo, que es más respetuoso con nuestro entorno y, por qué no decirlo, con la vida diaria de nuestros conciudadanos.
El futuro pasa irremediablemente por la innovación, la digitalización y por alargar la temporada al máximo, repartir turistas en espacio y tiempo, haciendo sostenibles nuestros recursos.
Por tanto, tenemos un gran reto por delante, un gran reto transformador, muy ilusionante… a la par que enormemente complicado.
Gracias de nuevo por invitarme a participar de esta interesante jornada.
Director territorial de MAPFRE en Baleares, Óscar Celada
Socio-director de Cuatrecasas en Palma de Mallorca, Javier Sola
Resto de compañeros de MAPFRE y Cuatrecasas que hoy nos acompañan…
Empresarios, amigas y amigos
Bienvenidos todos a la CAEB, bienvenidos a una nueva e interesante jornada empresarial en la casa de todos los empresarios, hoy dedicada a los ‘Beneficios de la retribución flexible para trabajadores y empresarios’, donde los expertos que hoy nos acompañan abordarán una variante retributiva que permite a los trabajadores tener mayor poder adquisitivo sin que se incremente el coste salarial para la empresa.
El sistema de retribución flexible presenta interesantes beneficios tanto para las empresas como para las personas trabajadoras. A lo largo de las próximas 2 horas nuestros protagonistas os expondrán las ventajas y los aspectos legales a tener en cuenta para poderlos implementar en vuestras organizaciones empresariales. La retribución flexible ofrece la posibilidad de mejorar el compromiso del trabajador, facilitando su vida diaria, y se adapta a las necesidades de la organización y de cada empleado.
Puede hacerse bien a través de:
Un seguro médico para los trabajadores
Tíquets de comida o restaurantes
Cheques de guardería
Tarjeta de transporte
Cursos y formación
Equipamiento para teletrabajar
Acciones de la empresa
O plantes de pensiones
Estos últimos, los planes de pensiones, también serán objeto de análisis a lo largo de la mañana, especialmente sus últimas modificaciones dentro del sistema de empleo.
Sin duda, abordamos una jornada de plena actualidad, dado que nos encontramos en el momento de negociación de los convenios colectivos de los diferentes sectores del tejido empresarial. Unos convenios que, permitidme recordar, se están aprobando por sectores tras meses de dura negociación, como es el caso del convenio de la sanidad privada de Baleares, que firmamos el pasado septiembre con un incremento salarial del 8% en 2 años, que beneficiará a más de 5.000 trabajadores de estas Islas.
Como bien sabéis, desde la patronal no negociamos convenios, pero sí estamos sentados con sindicatos y gobiernos en las mesas de diálogo correspondientes, tanto aquí como en Madrid, donde se alcanzan acuerdos que orientan las futuras negociaciones.
En este sentido, y dadas las manifestaciones y protestas que estamos teniendo en las últimas fechas, quisiera recordar que los empresarios no somos ajenos a los problemas que genera una inflación que no padecíamos en España desde hace más de 30 años y también a los efectos negativos de la guerra en Ucrania. Sin olvidar los dos duros años de pandemia que tantas dificultades han causado entre las empresas, no todas ellas superadas.
Por tanto, estando de acuerdo en que los salarios deben subir, no lo negamos, también hay que tener en cuenta que los costes de la actual crisis inflacionista no pueden asumirlo únicamente las empresas en forma de medidas parciales o subidas salariales. Desde CAEB llevamos tiempo solicitando una bajada de impuestos para que empresas y ciudadanos vean aliviada la presión fiscal en sus balances económicos y en sus nóminas.
En este contexto, resulta especialmente relevante evitar un escenario en el que los aumentos de los precios y salarios se retroalimenten entre sí, para no producir efectos de segunda ronda que nos lleven a una espiral inflacionista. Implementar la inflación en los salarios como exigen los sindicatos supondría un drama para la economía. Adecuar el incremento salarial en función de la inflación supondría más paro y el cierre de muchas empresas.
Desde CEOE se están proponiendo unas subidas paulatinas en los próximos años, pero NO ligadas al actual IPC… las empresas no pueden asumirlo. Conviene resaltar que el propio Gobierno ha negado a los funcionarios del Estado un aumento salarial ligado a la inflación. Por tanto, estamos dispuestos a mejorar la vida de nuestros trabajadores porque nuestros equipos son primordiales para nosotros, como siempre defendemos desde CAEB… pero sin comprometer la viabilidad de las empresas.
Así, en las próximas dos horas, vamos a escuchar las alternativas que nos ofrece la retribución flexible, que también se puede incorporar a las negociaciones de los convenios colectivos que estaba comentando, tan de actualidad.
Sin más, os dejo en manos de los expertos de Cuatrecasas y MAPFRE, a los que doy las gracias por confiar en CAEB para organizar un desayuno empresarial tan interesante como el de esta mañana. Bienvenidos a todos los que hoy nos acompañáis aquí en CAEB y también a los que siguen esta jornada en streming.
Presidente de la Asociación de Promotores Inmobiliarios de Baleares,
Directora general de la Asociación de Constructores de Baleares
Responsables de KPMG, que hoy nos acompañan…
Empresarios, amigas y amigos
Bienvenidos todos a la CAEB, la casa de todos los empresarios…
Y bienvenidos a esta interesante jornada dedicada a la actualidad del sector inmobiliario y de la construcción en Baleares, sin duda, uno de los sectores punteros de nuestro tejido empresarial.
Hace apenas un mes tuve la ocasión de asistir a una jornada de construcción sostenible organizada por la Asociación de Constructores de Baleares, cuyos responsables hoy también nos acompañan. Durante aquel encuentro quedó claramente expuesto la importancia del sector de la Construcción en nuestra economía, una economía muy marcada por el turismo y su estacionalidad. Clave, además, en una geografía limitada como la nuestra, donde el consumo de territorio está muy condicionado y donde la sostenibilidad es un objetivo ya irrenunciable.
Paralelamente a la buena dinámica de la actual temporada alta, donde hemos recuperado niveles de ocupación turística y visitantes de 2019, alargando la temporada hasta este mes de noviembre, sobresale la salud de la Construcción:
Un sector que tira del empleo…
Ayer conocimos que es uno de los sectores que más reduce el paro interanual en Baleares, con una caída del 29% el último año
Y que, además, ha sido el primero en las Islas en recuperar completamente el agujero económico que dejó la pandemia…
Lo hizo ya durante el segundo trimestre de este año, según el informe de coyuntura de CAEB
Con estos datos, no podemos dejar de alabar el trabajo de los constructores. Unos empresarios que no desfallecen, que sortean toda clase de crisis haciendo frente a los obstáculos que se encuentran por el camino. Entre ellos, uno de los más acuciantes y recientes es la subida de los precios de los materiales de construcción por culpa de la inflación, que ha afectado y está afectando a todo el tejido empresarial.
La falta de respuesta pública ante la promesa de incorporar las cláusulas de revisión de precios en los contratos públicos, como exige la Ley, propició que cerca de 60 obras públicas hayan quedado desiertas en Baleares en lo que llevamos de 2022. Una situación que parece se enderezará parcialmente con las indemnizaciones que el Govern balear ha aprobado para que las empresas constructoras, entre otras, puedan seguir asumiendo obras públicas.
Esta ayuda no compensará la totalidad de los sobrecostes, como asegura el sector, pero ayudará a la supervivencia de las empresas que llevan más de un año soportando la escalada de precios e incluso trabajando con pérdidas. Porque si las empresas no son compensadas por los sobrecostes que deben asumir, no se arriesgan a concursar porque, evidentemente, no pueden seguir perdiendo dinero indefinidamente.
Desde CAEB hemos insistido y lo seguiremos haciendo para que éste y otros asuntos de gran importancia para el sector se cumplan.
Porque si la construcción es importante dentro de la economía balear, no podemos obviar al sector inmobiliario en su conjunto, que supone el 20% de nuestro PIB, el segundo por detrás del turismo, incluyendo la parte que aportan los constructores. Un sector, el inmobiliario, que tiene que hacer frente no sólo a los problemas ya descritos, sino también a otro de nuestros principales focos de discusión: la falta de vivienda y el encarecimiento de ésta que viene padeciendo la Comunidad Autónoma balear…
En Baleares tenemos, cada vez más, una demanda muy superior a la oferta en todos los segmentos y tipologías, especialmente de vivienda. Un problema de difícil solución, que genera un amplio debate y requiere de medidas de calado, no improvisadas. Porque el sector inmobiliario de estas Islas sigue siendo enormemente atractivo para los extranjeros, que ven oportunidades tanto de negocio como de segundas o incluso primeras residencias atraídos por nuestro clima, servicios y calidad de vida.
No es éste el motivo del problema que atenaza el mercado inmobiliario, ahora que se ha abierto el debate sobre la posibilidad de limitar la compra de viviendas en Baleares a los no residentes o a las personas que llevan menos de 5 años viviendo aquí. Los motivos como la falta de suelo, la escasez de obra pública y vivienda social, la tramitación interminable, etc. serán detallados esta mañana por los ponentes que hoy nos acompañan.
Desde CAEB insistimos en poner en valor los aspectos que nos hacen competitivos, que hacen de nuestras Islas una región atractiva y que generan indirectamente otras vías de negocio a su alrededor para muchas empresas y familias. Es fundamental diversificar, dar mayor valor el resto del tejido empresarial que trabaja y genera riqueza y empleo de forma paralela, de la mano del turismo, como es el caso de la construcción y el sector inmobiliario, los protagonistas de la jornada que hoy nos reúne.
Os dejo ya con los verdaderos expertos en la materia, que pondrán el foco tanto en esa dificultad de acceso a la vivienda por parte del mercado local como en la normativa aplicable al sector, urbanística y también fiscal. Y en las oportunidades que ofrece el sector inmobiliario, sin olvidar el aspecto de la sostenibilidad, medio ambiente y responsabilidad social, que tanto nos preocupa y defendemos desde CAEB.
Gracias de nuevo a KPMG por elegirnos para la organización de esta jornada, que espero que sea de enorme provecho para todos los asistentes y responda a las grandes expectativas que ha generado.
Bienvenidos todos a la Gala de la Confederación de Asociaciones Empresariales de Baleares 2022, año que cumplimos 45 años de trayectoria. Bienvenidos a este Teatro Principal de Inca, recién reformado, que nos encantó nada más conocerlo este verano de la mano del alcalde. Gracias Virgilio por la disponibilidad y las facilidades.
Hemos iniciado esta gala, hoy desde el corazón del Raiguer, con las notas de Nina y la familia Bleuse, y las palabras de mi querido amigo Pablo, director artístico y musical de la Orquestra Simfònica de les Illes Balears. Un ejemplo, el de Mielgo y la familia Bleuse, de liderazgo y trabajo en equipo en el más amplio sentido de ambos conceptos. De liderazgo entendido como guía conductor, transmisor e inspirador de un grupo cohesionado … como acabamos de ver y escuchar en este escenario…
Porque es crucial saber compartir, motivar, delegar, trabajar en armonía y adaptarse a los cambios para que todas las piezas encajen y defiendan el interés común… como bien sabéis y hacéis todas las asociaciones y empresas que formáis parte de CAEB.
La capacidad del grupo, la unión dentro de la diversidad, es la que nos hace líderes, la que nos fortalece y la que hace que podamos ser la voz autorizada del tejido empresarial balear, tanto aquí en nuestras Islas como en el resto del territorio nacional.
Decía hace unas semanas durante una entrevista que “para que un liderazgo funcione tienes que rodearte de mejores profesionales que tú”. Y es así como lo siento, como me gusta trabajar y como ejerzo de presidenta de los empresarios de Baleares desde hace ya 8 años. Siento el respaldo de todos vosotros, dejándome asesorar, apoyándome en un gran equipo a la hora de tomar decisiones. Un equipo que debe combinar todas las características que Joana, María, Carme, Guillermo, Carlos, Gabriel, José Vicente y Ana han descrito en el vídeo que hemos tenido ocasión de presenciar hace un momento.
Los empresarios tomamos decisiones trascendentales, que van mucho más allá de nuestras empresas… son decisiones que pueden cambiar el rumbo de las personas, de las familias porque seguimos siendo nosotros, los empresarios y empresarias, los que con nuestras acciones generamos puestos de trabajo, riqueza y bienestar a la sociedad.
Los empresarios tenemos entre ceja y ceja la mejora continua, una mejora para nuestros productos, nuestros equipos humanos y para el conjunto de la ciudadanía… y no necesariamente en ese orden. Y, además, lo hacemos en diferentes escenarios, en diferentes momentos o ciclos económicos, cuando sopla viento de cola o cuando vienen mal dadas.
Ejemplo de nuestro empuje y capacidad de resiliencia han sido los dos duros años de pandemia que hemos dejado atrás, espero que definitivamente, hace unos meses. Dos ejercicios, los de 2020 y 2021, extremadamente duros, cuyas consecuencias aún arrastramos, pero que han dado paso, por fin, a un 2022 en el que hemos recuperado la normalidad. Bendita normalidad.
Hoy aquí, esta tarde-noche, disfrutamos de esa normalidad con el teatro lleno, sin mascarillas ni restricciones, fiel ejemplo de la temporada alta que está entrando en su recta final. Así es. Estamos ya en los últimos coletazos de una temporada como las de antaño, una temporada turística que se abrió con muchas dudas e incertidumbres, pero que está llegando a su fin con cifras de visitantes similares a las de 2019.
Hemos recuperado prácticamente todo el turismo que dejamos aparcado hace dos años, nos vuelven a visitar millones de personas… pero no podemos lanzar las campanas al vuelo: la rentabilidad no ha sido la misma que entonces.
Por varias razones:
Las dudas iniciales acerca del comportamiento de los turistas.
La falta de mano de obra cualificada que nos golpeó de bruces al inicio de la temporada… un problema grave, que perjudica nuestra imagen, y que no se ha solucionado durante todo el verano.
También por la inflación, que se mantuvo en dos cifras todo el verano, unas cotas no alcanzadas desde hacía 30 años, y que ha mediatizado el día a día de las familias… y de las empresas.
Y, por último, la invasión rusa en Ucrania, un conflicto que estalló cuando empezábamos a dejar atrás la pandemia y que, a día de hoy, no se vislumbra el final…
Un conflicto cuyas consecuencias están llevando al límite los recursos de las principales potencias europeas, entre ellas España.
Todos estos ingredientes han impedido, hasta el momento, que recuperemos los niveles de crecimiento económico prepandémicos. El PIB balear no conseguirá cerrar este año sus heridas… no lo hará ya hasta 2023.
El mercado laboral, por el contrario, se ha comportado de forma positiva con cifras de ocupación muy elevadas, en paralelo a la actividad. Sin embargo, un verano positivo no debe ocultar la incertidumbre que la desaceleración de las economías europeas, la desbocada inflación y la guerra provocan a nivel empresarial. El Banco de España acaba de rebajar al 1,4% las ya recortadas previsiones de crecimiento del Gobierno para 2023.
No nos inventamos nada, no somos catastrofistas, somos prudentes y tenemos la mirada puesta en el futuro.
Decía que ha sido una buena temporada, sí, nuestro modelo económico es fuerte y también innegociable, pero requiere de una profunda revisión porque estamos ante una transformación acelerada por la pandemia, que no podemos aparcar.
Desde CAEB consideramos que la transformación de la que estamos hablando pasa por cambiar volumen por valor, SÍ, algo que defendemos desde hace años porque tenemos que ser más respetuosos con nuestro entorno y, por qué no decirlo, con la vida diaria de nuestros conciudadanos. Debemos abordar esta transformación de la mano de la innovación, la digitalización y la circularidad. Nuestras empresas se están adaptando poco a poco a los nuevos tiempos, estáis haciendo verdaderos esfuerzos para actualizaros, para para adecuar vuestros servicios al siglo XXI.
El futuro pasa irremediablemente por la citada innovación, las nuevas tecnologías, las energías renovables y, por algo tan fácil de decir como difícil de lograr alargar la temporada al máximo, repartir turistas en espacio y tiempo, haciendo sostenibles nuestros recursos…
Este año lo estamos logrando, alargando la actividad más allá de este mes de octubre en algunos destinos:
pero queremos ser atractivos durante más tiempo
queremos y debemos saber cómo aprovechar nuestros rincones, pueblos, instalaciones…
también los meses de invierno…
… haciendo compatible el sector servicios con el resto de los sectores económicos de las Islas, también potentes, punteros y que debemos cuidar y potenciar.
En la diversificación está una de las claves del crecimiento y la supervivencia empresarial, como bien sabéis muchos de los que hoy nos acompañáis.
Otra de las claves está en la formación, ya que uno de los problemas acuciantes que hemos padecido todos los empresarios este verano ha sido la falta de mano de obra cualificada. Un problema que afecta a todos los sectores productivo de las Islas.
Desde aquí, aprovecho para insistir en la necesidad de apostar por la formación a través de programas específicos, Formación Profesional Dual, idiomas, tecnificación, etc. porque es la única manera de no prolongar esta ausencia de profesionales que nos ha dejado la pandemia, es la forma de retener el talento y es la única manera de contar con trabajadores más y mejor cualificados.
Insisto. Tenemos un gran reto por delante, un gran reto transformador, ilusionante a la par que enormemente complicado. Porque, además de saber cómo gestionar esta transformación del turismo, nuestra economía también tiene que hacer frente a las amenazas de un mundo globalizado donde, cualquier acontecimiento, nos afecta a todos… y de qué manera, como hemos comprobado los últimos años.
Hay situaciones que no podemos controlar, como algunas de las descritas durante esta intervención…
Pero hay otras muchas que sí. Podemos mejorar, actualizarnos, digitalizarnos, innovar, apostar por las energías renovables, contribuir a la economía circular y la sostenibilidad. Solo necesitamos las herramientas adecuadas, las reglas del juego bien definidas, que no nos las cambien sobre la marcha, como la reciente e intolerable subida de la base máxima de cotización en los Presupuestos Generales del Estado. Necesitamos lealtad desde la Administración, seguridad jurídica y certidumbre para poder acometer la transformación que queremos.
Entre las herramientas imprescindibles que venimos reclamando se encuentran algunas ya históricas:
El Régimen Especial de Baleares, un proyecto demandado desde hace décadas, aprobado parcialmente en 2019 y cuya parte fiscal acaba de ser desbloqueada y anunciada tanto por el Gobierno central como por el autonómico.
Las medidas fiscales del REB, que afortunadamente ya figuran en el proyecto de Presupuestos Generales del Estado, van a ser muy importantes para paliar las desventajas de las empresas por el hecho insular y van a fomentar las inversiones productivas en Baleares.
No olvidemos, en cualquier caso, que estas medidas fiscales están destinadas a la reinversión de los beneficios y son muchas las empresas que en estos momentos no están teniendo beneficios, por lo que difícilmente podrán invertir. Tampoco acabamos de entender su tiempo de aplicación. ¿Por qué hasta 2028? El REB se aprobó para que sea permanente, no temporal.
La segunda de las herramientas que estamos esperando los empresarios como agua de mayo son… los archiconocidos fondos europeos.
El panorama general en Baleares, que no difiere del resto de España, como bien saben en la CEOE, es preocupante: el 78% de los empresarios califica su gestión de “negativa o muy negativa”: Desde CAEB reiteramos una vez más, y no nos cansamos de repetirlo, en la necesidad de que los fondos europeos lleguen a las empresas.
En este sentido, tendemos la mano al Govern balear para ayudar, con recursos y personal propios, a flexibilizar las convocatorias, que hoy por hoy tienen una carga burocrática y de dispersión entre distintas consellerias que hace muy difícil la presentación de proyectos. No son sólo reivindicaciones del sector empresarial español. Desde la Comisión Europea son conscientes de este problema, y estamos hablando del mayor ejercicio de solidaridad y financiación jamás aprobado desde la UE.
Tampoco nos cansamos de solicitar una agilización administrativa en la tramitación de las subvenciones o ayudas, una simplificación ajustada a la realidad de la situación del tejido empresarial.
En estos momentos, los retrasos suponen aumento de deudas lastrando más la delicada situación de muchas empresas de Baleares.
Y, por último, pero no menos importante, tenemos ante nosotros la renovación de los convenios colectivos… cada sector afronta unos meses de dura negociación laboral con los trabajadores.
Pero, ¿qué empresario no quiere mejorar la situación y la vida de sus empleados? Igual los hay, pero yo no conozco a ninguno.
Los empresarios apostamos por el bienestar de todos, empezando por nuestros equipos, como he expresado al inicio de mi intervención. Pero si una empresa no cuadra sus balances, tampoco puede pagar sus nóminas… Si una empresa no está saneada, entonces corre el riesgo de quiebra. La falta de personal cualificado al que hacía mención anteriormente está provocando que las empresas de Baleares pierdan productividad, y esto conduce a muchas al cierre. Y sin empresa, no se pueden subir las rentas del trabajo.
Sin empresa, no hay sueldos, ni trabajadores ni se genera riqueza… El mejor escudo social, el que garantiza continuidad, estabilidad y crecimiento es el empleo. Y para que haya empleo tiene que haber tejido empresarial saneado, competitivo y con alta productividad. Sin empresas no hay empleo. Y sin empresas competitivas no puede haber empleo de calidad.
Desde la patronal apoyamos las ayudas públicas para transportes, comercio, pymes y autónomos, pero también reclamamos ayudas directas como la rebaja de impuestos que nos permita reforzarnos y avanzar.
Asimismo, nos preocupan las cuentas públicas. Tanto los Presupuestos Generales del Estado que prevén un déficit que incrementa la deuda cómo los próximos Presupuestos de esta Comunidad Autónoma, que aún nos conocemos.
Las empresas sabemos mejor que nadie que los déficits y la deuda condicionan el futuro y pueden comprometer la viabilidad y la continuidad de un proyecto. Entendemos que en momentos de dificultad hay que asumir esfuerzos extraordinarios, pero sin comprometer el futuro con decisiones a corto plazo que condicionarán el bienestar colectivo. Nuestro objetivo número 1 es que el tejido productivo sea lo suficientemente fuerte para poder afrontar situaciones de dificultad como la actual.
Esta es nuestra voz, nuestra hoja de ruta, la que os describo hoy aquí, en persona… sin interferencias, sin interpretaciones partidistas o mediáticas, más o menos interesadas.
Hoy es un día para reivindicarnos, para ensalzar el papel del empresario o empresaria, el de todos los que dedican su esfuerzo, sacrificio y trabajo diario al porvenir de la sociedad. Es el día de todos aquellos que no desconectáis ni los días libres, ni en vacaciones, porque vuestros negocios no se detienen, no descansan. Hemos asumido riesgos, superado juntos una pandemia y juntos también afrontaremos un futuro lleno de oportunidades.
Os animo a seguir siendo:
Constantes
Ambiciosos
Innovadores
Y generosos
No es la primera vez que afrontamos retos de gran envergadura y que salimos vencedores. No somos conformistas, estamos ante un gran cambio y queremos liderarlo. Sigamos devolviendo a la sociedad toda nuestra capacidad de trabajo, nuestro ímpetu, nuestro deseo de innovar, de seguir construyendo un mejor siglo XXI, haciéndolo sostenible con la ayuda de toda la sociedad.
Parafraseando al presidente de la CEOE, al que por cierto espero poder verlo de nuevo aquí el año que viene:
“Los empresarios no somos el problema, somos la solución”.
Presidenta de la Asociación de Constructores de Baleares y vicepresidenta de CAEB, Fanny Alba, autoridades, empresarios, amigas y amigos.
Gracias en primer lugar a la Asociación de Constructores de Baleares por organizar esta primera jornada de Construcción Sostenible y, en segundo lugar, por darme la oportunidad de intervenir en un foro tan importante como éste. Importante, muy importante me atrevería a decir, puesto que el sector de la Construcción ha jugado siempre y continúa jugando un papel clave en nuestra economía, tan marcada por el turismo y su estacionalidad.
Clave, además, en una geografía limitada como la nuestra, donde el consumo de territorio está muy condicionado y donde la sostenibilidad, que hoy aquí se ha tratado a través de las diferentes ponencias, es un objetivo fundamental e irrenunciable.
Paralelamente a la buena dinámica de la actual temporada alta, donde hemos recuperado niveles de ocupación turística y visitantes de 2019, sobresale la salud de la Construcción. Un sector que tira del empleo:
Esta misma semana hemos conocido que es el que más reduce el paro interanual en Baleares, con un descenso del 30% en el último año.
Y que, además, es el primero en las Islas en recuperar completamente el agujero económico que provocó la pandemia… Lo hizo ya durante el segundo trimestre de este año, según el informe de coyuntura de CAEB.
Mientras las Islas siguen un 7% por debajo en actividad económica respecto a 2019, la Construcción ya se sitúa en niveles prepandémicos.
Con estos datos, no podemos dejar de alabar el trabajo de los constructores. Unos empresarios que no desfallecen, que sortean toda clase de crisis, como hemos comprobado en los últimos 15 años, a base de esfuerzo y capacidad de resiliencia, por muchos obstáculos que se encuentren por el camino.
Sin ir más lejos, recientemente hemos conocido desde la propia Asociación de Constructores que 57 obras públicas han quedado desiertas en Baleares en lo que llevamos de 2022 por valor 58,6 millones de euros. Todo por el incumplimiento por parte de la Administración balear de incorporar las cláusulas de revisión de precios en los contratos públicos, como exige la Ley, debido al encarecimiento de los materiales que estamos padeciendo todos los empresarios y con especial virulencia los constructores.
La gran mayoría de las citadas obras corresponden a ayuntamientos, como se puso de manifiesto durante la última Mesa de Diálogo Social del Govern a la que tuve ocasión de asistir, y como muy bien habéis señalado también desde la propia Asociación. Como bien sabéis, hablamos de obras que afectan a colegios, viviendas sociales, carreteras, instalaciones culturales y deportivas. Al no ser compensadas por los sobrecostes que deben asumir, las empresas no se arriesgan a concursar porque, evidentemente, no pueden seguir perdiendo dinero.
Desde CAEB seguiremos insistiendo en este asunto tan importante porque los acuerdos se tienen que cumplir.
También desde la patronal, junto con las asociaciones de Constructores y Promotores, hemos presentado alegaciones en contra del proyecto del Govern balear aprobado el pasado junio para cambiar la Ley para la Conservación de Relevancia Ambiental porque provoca inseguridad jurídica y no respeta los principios de proporcionalidad y de eficacia.
Los constructores y promotores no pueden verse afectados con la paralización de proyectos ya aprobados. Se está posibilitando de manera cautelar y durante un periodo de tiempo dejar sin efecto concesiones o autorizaciones administrativas sin decir ni una sola palabra de las indemnizaciones que eso genera. Este proyecto no genera un marco normativo estable, predecible, integrado, claro y de certeza, es decir, genera incerteza, lo peor que puede sufrir un empresario, que debe tomar decisiones.
Por eso hemos pedido que se suprimen o se modifiquen prácticamente la totalidad de los artículos que incorpora la nueva ley. Veremos si la voluntad de diálogo es cierta en éste como en otros asuntos.
Por último, entre los obstáculos que se están encontrando los constructores en los últimos meses están las limitaciones que aplican algunos municipios durante la temporada turística mediante las ordenanzas contra el ruido, lo que puede provocar que hasta un 20% de los trabajadores contratados como indefinidos por el sector acaban convertidos en fijos discontinuos. Ahora que desde el Gobierno se está incidiendo en la contratación estable, de acuerdo a la unificación de los tipos de contrato, este problema podría afectar a unos 7.500 profesionales de la Construcción en las Islas.
Tenemos que hacer posible la convivencia del turismo con el resto de los sectores empresariales de Baleares. Si el objetivo común es diversificar y ampliar al máximo la temporada, estamos obligados a entendernos desde los diferentes motores económicos, con respeto y comprensión, evaluando los pros y contras de cada situación o proyecto.
Por último, no quería pasar por alto uno de los problemas acuciantes que hemos padecido todos los empresarios este verano… la falta de mano de obra cualificada. Un problema que afecta también gravemente al sector de la Construcción. Desde aquí, aprovecho para insistir en la necesidad de apostar por la formación a través de programas específicos, Formación Profesional Dual, etc. porque es la única manera de no prolongar esta ausencia de profesionales que nos ha dejado la pandemia, es la forma de retener el talento y es la única manera de contar con trabajadores más y mejor cualificados.
Decía hace unos días que la pandemia que nos ha azotado los dos últimos años ha acelerado una transformación turística ineludible, un cambio de volumen por valor ya iniciado antes de la crisis sanitaria que debe conducirnos hacia un modelo que, por un lado, permita mantener y gestionar mejor nuestra principal fuente de ingresos y, por otro, que haga más confortable el día a día de quienes vivimos, trabajamos y también queremos disfrutar de nuestra casa, nuestras Islas.
Pero esta transformación también debe venir de la mano de la innovación, la digitalización y la circularidad. Nuestras empresas se están adaptando poco a poco a los nuevos tiempos, se están actualizando para adecuar sus servicios al siglo XXI, también las constructoras. Porque para logar este ambicioso objetivo, también necesitamos mejoras en infraestructuras como carreteras, hospitales y centros de salud, viviendas y, por supuesto, en los hoteles.
Así, no me cabe duda de que el papel de la Asociación de Constructores de Baleares seguirá siendo, como decía al inicio de mi intervención, imprescindible para construir el futuro que queremos para todos.
Gracias de nuevo a la Asociación de Constructores de Baleares por la puesta en marcha de esta jornada, que espero que sea la primera de muchas.
Director en Baleares de WTW, Juan Carlos Tárrega, autoridades, empresarios, amigas y amigos
Es para mí un honor poner el broche a esta XVII jornada anual de Gestión de Riesgos en el Sector Turístico que organiza la consultora internacional WTW. Un honor y a la vez una responsabilidad, puesto que a lo largo de esta mañana hemos ido escuchando a verdaderos expertos turísticos en turismo disertar sobre algo tan complejo como son los
‘Nuevos tiempos, retos y las claves de la transformación’… que estamos viviendo en nuestro principal sector económico.
Porque si en algo estamos todos de acuerdo es que el turismo ha cambiado, que la pandemia que nos ha azotado los dos últimos años ha acelerado una transformación turística ineludible, un cambio de volumen por valor ya iniciado antes de la crisis sanitaria y que ahora debemos afrontar en un contexto global donde las ganas de viajar y de conocer Mundo no sólo han vuelto a niveles precrisis, sino que incluso los han superado. Tanto que, quizás, ese anhelo de cambio de volumen por valor haya podido quedar obsoleto, o sea insuficiente, especialmente en un territorio limitado como son estas Islas.
La temporada alta aún no ha finalizado aquí en Baleares (esperemos que se alargue todo lo posible este otoño), pero podemos ir extrayendo ya conclusiones.
Pese a que la temporada pueda calificarse de positiva por la vuelta a la normalidad y la gran cantidad de visitantes recibidos, la realidad turística y económica que nos deja el presente verano no es tan boyante:
La desbocada inflación, la falta de suministros y el encarecimiento y retraso de muchos productos han mermado considerablemente la rentabilidad empresarial
La falta de mano de obra desde la pasada primavera se ha prolongado, condicionado y dificultado la puesta en marcha de negocios y la calidad de los servicios
El problema del transporte público ha sido fiel de una temporada desbordante en muchos sentidos, dando lugar a problemas que debemos atajar los próximos meses
Y, como pusimos de manifiesto ayer al presentar el informe de coyuntura económica del segundo trimestre de 2022, seguimos un 7% por debajo de los niveles de actividad prepandemia
Por todo ello, debemos ser cautos. Los indicadores y previsiones económicas nos conducen a unos meses inciertos, llenos de obstáculos y dificultades.
Decía el pasado mes de mayo que los que nacimos y vivimos aquí comprendemos por qué los extranjeros se enamoran de nuestras Islas. Y que esta temporada volveríamos a acercarnos a la cifra de millones de turistas que nos visitan cada año, que nos visitaban ya antes de la crisis sanitaria.
Tras dos años tan duros y complicados, que nos han golpeado a todos, a todos los sectores económicos, pero con especial virulencia al turismo hemos vuelto a poner en valor nuestro destino dentro y fuera de nuestras fronteras… nuestras playas, nuestros hoteles, también nuestros restaurantes y pueblos. En definitiva, todo aquello que nos convierte en un destino de primer nivel como el que somos, y nos reconocen internacionalmente.
Sin embargo, en pocos meses hemos pasado de unas ganas y expectación desbordadas por vivir un verano como los de antes a una casi post temporada con algunas sombras alargadas. A lo largo de estos meses de verano hemos convivido, leído escuchado a diario numerosas quejas por un ¿nuevo? problema sobrevenido: la masificación turística.
Aunque estamos en cifras que ya hemos soportado en el pasado, los meses de julio y agosto se han caracterizado por una sensación de desborde, especialmente en puertos y aeropuertos, aparte de algunos de los destinos más importantes de Baleares. Y tras escuchar hoy aquí a los expertos, tenemos todos claro que debemos buscar soluciones, encaminarnos hacia un modelo que, por un lado, permita mantener y gestionar mejor nuestra principal fuente de ingresos y, por otro, que haga más confortable el día a día de quienes vivimos, trabajamos y también queremos disfrutar de nuestra casa, nuestras Islas.
Debemos apostar por un turismo sostenible, eso lo tenemos claro… porque nuestros recursos son limitados. Pero, ¿qué significa realmente esto?
Desde CAEB consideramos y defendemos que la transformación de la que estamos hablando pasa por cambiar volumen por valor, SÍ, como ya se está produciendo en algunos rincones de las Islas, donde las inversiones hoteleras y las apuestas de algunos municipios van encaminadas hacia ese otro turismo de mayor poder adquisitivo, que es más respetuoso con nuestro entorno y, por qué no decirlo, con la vida diaria de nuestros conciudadanos. Pero esta transformación también debe venir de la mano de la innovación, la digitalización y la circularidad.
Nuestras empresas se están adaptando poco a poco a los nuevos tiempos, se están actualizando para adecuar sus servicios al siglo XXI:
Mejorando la calidad de la oferta en respuesta a la demanda de unos turistas cada vez más exigentes
Compitiendo con destinos que bajan los precios, pero que no se acercan a nuestro nivel de excelencia
Y, sobre todo, respetando y cuidando nuestro medio ambiente a través de las normativas nacionales y europeas en materia de reciclaje, energías renovables y eficiencia energética.
El futuro pasa irremediablemente por la citada innovación, la digitalización y por alargar la temporada al máximo, repartir turistas en espacio y tiempo, haciendo sostenibles nuestros recursos. Por tanto, tenemos un gran reto por delante, un gran reto transformador, ilusionante a la par que enormemente complicado. Porque, además de saber cómo gestionar esta transformación del turismo, nuestra economía también tiene que hacer frente a las amenazas de un mundo globalizado donde, cualquier acontecimiento, nos afecta a todos.
Seguimos muy pendientes de las consecuencias de una guerra en Ucrania que parece no tener fin… También de las consecuencias de una inflación histórica que se mantendrá por encima del 8% lo que resta del año. Y, por todo ello, tenemos la obligación de aprovechar el invierno para reflexionar y preparar un 2023 donde debemos ir dando pasos en pos de esa transformación ineludible:
que nos mantenga como referente turístico mundial,
con libertad,
a través del impulso empresarial,
sabiendo escuchar y arrimar el hombro.
Los empresarios de Baleares ya hemos demostrado en numerosas ocasiones que se puede contar con nosotros. Aceptamos este reto transformador con ganas de sumar, con toda la humildad y sencillez y también la fortaleza que siempre nos ha caracterizado con el objetivo de seguir generando empleo y riqueza.
Gracias de nuevo a WTW por colaborar con nuestros empresarios, y por elegir Palma para esta interesante jornada.
Delegado territorial de Faconauto y miembro de la junta directiva de CAEB, Andreu Vidal
Amigas y amigos
Bienvenidos todos a esta jornada de trabajo sobre concesionarios.
Permitidme en esta breve introducción destacar el importantísimo papel que desempeña el sector de la automoción especialmente aquí en Baleares, un territorio limitado por la insularidad donde el tránsito de vehículos cobra una vital importancia y cuya transformación está encima de la mesa.
Faconauto es la patronal que integra las asociaciones de concesionarios oficiales de turismos, vehículos industriales y maquinaria agrícola del mercado español. Representa los intereses de:
022 concesionarios
53 de éstos en Baleares
Generan 152.000 empleos directos
400 de ellos en las Islas
Y facturan 36.000 millones de euros
730 en nuestro Archipiélago
Que representan el 3% del PIB
casi lo mismo que a nivel balear (2,9% del PIB)
Por tanto, es evidente que hablamos de un sector estratégico, tanto a nivel nacional como autonómico.
En los próximos años, no sabemos a qué ritmo, quizás hoy nos lo desvelen nuestros invitados, los concesionarios van a sufrir una profunda transformación, aquella que lleva intrínseca el cambio del carburante tradicional a las fuentes de energías renovables. Y que obvia decir que nos afecta a todos…
Llevamos meses con subidas constantes del precio de la gasolina y el gasoil, meses en los que las visitas a las gasolineras se han multiplicado exponencialmente. Es así, el parque automovilístico está en plena transformación y afronta un futuro a corto y medio plazo lleno de retos.
A día de hoy, según Faconauto, la edad media del parque automovilístico de Baleares alcanza los 12,9 años, algo menos que la media nacional, que se queda en 13,6 años de antigüedad. Es decir, conducimos vehículos algo más jóvenes que los del conjunto del país. Pero no nos engañemos, esta cifra confirma la tendencia negativa de los últimos ejercicios: empeoramos en 0,4 años respecto a 2020.
Por tanto, la tendencia es a tener vehículos más y más viejos en nuestras carreteras y, por consiguiente, más contaminantes. Es urgente, como defiende el sector, la aprobación de medidas urgentes que aceleren la descarbonización del parque automovilístico. España necesita un plan de choque para renovar sus vehículos y así:
contribuir a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero
y fomentar una movilidad más ecológica y sostenible
No olvidemos que según los expertos el 92% de las emisiones de dióxido de carbono (CO2) corresponde a vehículos de más de 10 años de antigüedad. Además de favorecer la sostenibilidad ambiental y la protección de nuestro limitado entorno, el necesario empuje que necesita el sector de la automoción para recuperar las ventas prepandemia responde a cifras puramente económicas:
Es cierto, (y abro paréntesis), que Baleares se salva de los descensos generalizados a nivel nacional en el número de matriculaciones; más bien al contrario, de enero a mayo éstas han aumentado un 42% en nuestras Islas respecto al mismo periodo del año anterior… Unas subidas que se enmarcan dentro del sector turístico: Baleares ha recuperado los vehículos de alquiler cuyas matriculaciones en 2020 y 2021 fueron prácticamente nulas.
Esta fuerte subida de matriculaciones, que contrasta con los datos negativos de la mayor parte de las CCAA, reafirma por otro lado que la temporada turística volverá o superará los niveles precrisis. Y constata también cómo todos los sectores productivos de Baleares están de una forma u otra conectados a nuestro motor económico: el turismo.
(Cierro paréntesis)
No obstante, decía, el difícil momento que atraviesan las matriculaciones de vehículos en nuestro país, con un descenso medio del -11,5% de enero a mayo, lo que influye fuertemente en la aportación que hace el automóvil a la recaudación de impuestos. El Ministerio de Hacienda dejó de ingresar unos 1.200 millones de euros por la compra de vehículos en 2021 en comparación con lo recaudado en 2019, último año ‘normal’ para el sector.
Toda esta situación se está viendo muy afectada por la incertidumbre y las consecuencias que provoca la guerra en Ucrania, el aumento de los precios o la fuerte escalada del combustible. Las previsiones adelantadas por la patronal señalan que 2022 cerrará con la venta de unas 830.000 unidades… cifra que mantendría al sector por debajo de los números prepandemia. Una situación sumamente complicada que contrasta con la recuperación experimentada por otros sectores económicos, lo que justificaría la adopción del citado plan de choque que reclama Faconauto.
Por todo lo expuesto, desde la CAEB apoyamos las reclamaciones de la patronal de la automoción, que exige al Gobierno el desarrollo de planes intensivos de descarbonización que:
incentiven la compra de vehículos
acelere la recuperación del sector
y la expansión real del vehículo eléctrico
Para que nos hagamos una idea, les dejo una última y clarificadora cifra:
En Baleares hay alrededor de 900 puntos de recarga de vehículo eléctrico de acceso público
Se necesitarán unos 500 en 2030 para cumplir con la previsión de vehículos electrificados
Bienvenidos a la VI edición de los Premios CAEB-Santander a la Innovación Empresarial para Pymes…
A continuación, vamos a entregar unas distinciones dedicadas a las pequeñas y medianas empresas de Balears que, son, y nunca me cansaré de decirlo, la inmensa mayoría de la gran familia empresarial que formamos en CAEB.
Quiero empezar expresando mi sincero agradecimiento al Banco Santander y a su directora territorial en Baleares, Celia Torrebadella, por contar siempre (y ya van cinco años consecutivos), con vuestro apoyo en una iniciativa tan importante como ésta. Una iniciativa clave, me atrevería a decir, porque tanto CAEB como el Banco Santander estamos reconociendo y poniendo en valor las empresas de nuestra comunidad que apuestan por la innovación como estrategia para su consolidación y crecimiento.
Quiero agradecer también la colaboración de los miembros del jurado que, en esta ocasión, además del Banco Santander y de CAEB, ha estado compuesto por:
Loren Carrasco, vicerrectora de Innovación y transformación digital de la Universitat de les Illes Balears
José Mañas, presidente de la Comisión de I+D+i de CAEB,
Jordi Almirall, business office leader Baleares de FI Group,
Y por José Martí, director de GEOMA CEN, empresa ganadora de este mismo premio empresarial en su edición de 2020.
A todos, muchísimas gracias por contribuir a dotar a estos premios del rigor y del prestigio que merecen. Y gracias también por dedicar vuestro valioso tiempo a decidir qué candidatura se llevael Premio a la PYME innovadora.
Este es un premio que va dirigido a empresas de entre 1 y 250 trabajadores que ofrecen:
un nuevo producto,
un servicio considerado innovador,
o que hayan desarrollado alguna acción innovadora para mejorar su gestión, productividad o competitividad
Además de la dotación económica para el ganador, como en años anteriores en esta edición también vamos a premiar a la organización empresarial en la que esté integrada la empresa ganadora, porque queremos reconocer la implicación y el compromiso de las más de 90 organizaciones empresariales que conforman CAEB con la promoción de la innovación entre sus asociados, un factor clave de competitividad.
Este año hemos contado con la preinscripción de 16 empresas a estos premios, y se han llegado a valorar un total de 8 candidaturas. Hace unos minutos los cuatro candidatos finalistas han defendido sus proyectos ante el tribunal del jurado, que ha tenido una difícil elección puesto que todos los proyectos han sido muy competitivos y de gran interés desde el punto de vista de la innovación. Por ello, además del ganador, los finalistas recibirán también una distinción por sus excelentes propuestas.
En este punto, creo honestamente que es muy importante destacar el compromiso de CAEB con la innovación. Innovar es la capacidad de transformar las buenas ideas en resultados. Una definición que…
es muy fácil de enunciar,
es muy fácil de decir,
pero que, como todos sabéis, supone una enorme dificultad llevarla a cabo y, por tanto, también un enorme mérito.
Transformar buenas ideas en resultados supone romper rutinas, desafiar todos los convencionalismos y buscar más allá de nuestros límites, explorando nuevos ámbitos, más allá de las fronteras de lo conocido.
Como bien saben tanto los 5 finalistas como el resto de candidaturas presentadas o cualquier actuación emprendida desde la innovación. Innovar también supone asumir riesgos que sólo a veces conllevan beneficios. Pero lo más maravilloso es que estos beneficios no son solo para el que innova sino para el conjunto de la sociedad, que puede disfrutar de los resultados de una idea innovadora convertida finalmente en realidad.
Por ello, las empresas innovadoras merecen todo el apoyo y reconocimiento que hoy les damos aquí. Y aprovecho para reclamar un mayor apoyo y reconocimiento también por parte de la Administración… porque son las pymes, las pequeñas y medias empresas, las que generan empleo, riqueza, bienestar a la ciudadanía y son las que empiezan a ver la luz, con muchas dificultades, tras dos años durísimos marcados por la pandemia que ha dejado por el camino a muchas de estas pymes.
Por desconocimiento, en ocasiones se asocia a CAEB con el mundo de las grandes empresas, aunque la realidad es bien distinta. CAEB acoge a las grandes empresas de Baleares, sí, pero también aglutina en su seno a una inmensa mayoría de miles y miles de pequeñas y medianas empresas, microempresas y autónomos que generan la mayor parte de los puestos de trabajo que se crean en Baleares y que, por ello, merecen un reconocimiento especial y el apoyo de toda la sociedad en su conjunto porque vertebran y cohesionan nuestra sociedad.
Por eso, es necesario que las administraciones públicas incentiven a la innovación de nuestras pymes. Y entendemos que uno de los estímulos más eficaces sería la reducción de impuestos a las empresas que, como he dicho, están respirando de nuevo, pero con las cargas aun presentes de estos dos años de crisis…Si vieran aligerada su carga impositiva las empresas podrían destinar más recursos a innovar… Nuestro sistema fiscal deja escaso margen para el I+D+i siendo, por tanto, una traba para el crecimiento empresarial.
Otro estímulo que permitiría a las pymes apostar por la innovación son los fondos europeos Next Generation, que se están quedando en proyectos públicos sin llegar de forma directa al empresario.
Personalmente, estoy convencida de que innovar es el camino que debe recorrer una sociedad que aspire a mejorar la calidad de vida y el bienestar de sus ciudadanos.
Uno de los objetivos del Plan Estratégico de CAEB es que Baleares se constituya cada vez con más fuerza en un auténtico referente en Europa en materia de innovación. Por ello, con estos premios, tratamos de estimular este propósito que, como decía, consideramos estratégico.
La innovación es el noveno de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible incluidos en la Agenda 2030 de la ONU para avanzar hacia un futuro mejor. Unos objetivos cuya aplicación lideramos aquí en CAEB también desde la presidencia de la Comisión de Responsabilidad Social Empresarial de la CEOE. Una Comisión desde donde trabajamos de forma intensa para impulsar estrategias empresariales que entiendan que innovar es un acto de responsabilidad social y un factor de productividad y competitividad.
Incrementar nuestra capacidad innovadora ha de ser una prioridad en la que todos, y desde todos los ámbitos, debemos colaborar. Porque innovar es necesario, es una responsabilidad de todos y nos beneficia a todos.
Muchas gracias de nuevo a todos los presentes.
Y reitero mi sincera enhorabuena a los finalistas que ahora vamos a presentar por su apuesta innovadora y, por supuesto, al ganador que conoceremos en los próximos minutos.
Bienvenidos a la presentación de la edición dedicada íntegramente a Mallorca de la revista internacional The Business Year.
Es un placer, en primer lugar, reunirnos en una finca tan especial como esta de Binigual es comprensible, desde rincones tan maravillosos como éste, entender por qué los extranjeros se enamoran de nuestras Islas. Y es esa locura que Baleares, en general, y Mallorca, en particular, provoca en los millones de turistas que nos visitan cada año, la que hace posible que una publicación internacional como la que hoy protagoniza este acto dedique íntegramente sus 160 páginas a nuestra Isla.
En un cuidadísimo trabajo periodístico, a lo largo de 90 entrevistas, The Business Year ofrece un repaso exhaustivo a la realidad de Mallorca:
Actualidad económica
Turismo
Deportes
Sostenibilidad
Construcción
Puertos
Sector inmobiliario
Todo un sinfín de opiniones que acercan al lector extranjero a la realidad de la Isla, sus rincones, sus particularidades, su belleza… las claves de su éxito, de nuestro éxito. Ha sido un verdadero placer participar en su elaboración, poner nuestro granito de arena desde CAEB a tamaño estudio socioeconómico.
Casi una obligación, si me lo permiten, en el buen sentido de la palabra.
Porque, tras dos años tan duros y complicados, que nos han golpeado a todos, a todos los sectores económicos, pero con especial virulencia al turismo necesitamos volver a poner en valor dentro y fuera de nuestras fronteras nuestro destino, nuestros hoteles, nuestros restaurantes y pueblos. En definitiva, todo aquello que nos convierte en un destino de primer nivel como el que somos, y nos reconocen internacionalmente.
Estamos expectantes y ansiosos de vivir una nueva temporada como las de antes. Porque sí, 2022 volverá a ser una temporada de enorme éxito turístico, según desvelan todos los indicadores y estamos comprobando ya estas últimas semanas. De hecho, aunque la carta del editor que abre la publicación señala que, según varios de los entrevistados, este verano recuperaremos un 70% u 80% del volumen de negocio de 2019. Estas cifras parece que se superarán si atendemos a las últimas previsiones y según se van acercando los meses más importantes de la temporada.
Pero ojo, que no todo es infinito, y menos el territorio, especialmente el insular, obviamente.
Como ya he comentado en mis últimas intervenciones, desde CAEB apostamos por un crecimiento sostenible, acorde a la Agenda 2030 de la ONU y de sus 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Debemos crecer mejor, a través de la tecnología y la innovación. La pandemia ha propiciado un impulso hacia una nueva perspectiva, con el objetivo de encontrar mejores oportunidades y también mejores soluciones que vayan de la mano hacia una reactivación más sostenible.
En este sentido, la circularidad de la que hablamos y defendemos es un factor clave para fortalecer la economía de Baleares y convertirla en referente de progreso, bienestar económico, social y medioambiental. La economía lineal ha llegado a su fin. La recuperación económica ya iniciada, que se prolongará uno o dos años más, la competitividad de las empresas, la sostenibilidad y la generación de empleo pasan necesariamente por un cambio de modelo hacia la economía circular.
Decía el otro día que las empresas, los empresarios, estamos viviendo momentos complicados tras dos años muy duros marcados por la crisis sanitaria y ahora por una inflación disparada y también por la incertidumbre que genera la guerra en Ucrania. Parece que no hay manera de trabajar y progresar en un entorno de certidumbre,
Aun así, con todas estas vicisitudes, el sector empresarial ha sabido aguantar y volver a levantarse para seguir generando empleo y riqueza. Los mallorquines, las empresas de Baleares somos un buen ejemplo de esta resiliencia, y también de la apuesta por la sostenibilidad. Una sostenibilidad que, como pude comprobar hace una semana en el Madrid Leaders Fórum al que asistí, está entre los objetivos principales e irrenunciables de los líderes de las compañías punteras españolas.
Junto con la sostenibilidad no podemos olvidarnos del otro gran camino emprendido por las empresas líderes en todo el Mundo: la digitalización. La transformación digital debe ser el eje que pivota el crecimiento de las empresas, tenemos que ser pioneros y estar a la vanguardia de las nuevas tecnologías.
Todas estas palabras, todo este tratado de intenciones, esta hoja de ruta está perfectamente reflejada en las 160 páginas de The Business Year… Empresarios, políticos, deportistas, chefs, artistas… toda la sociedad mallorquina se abre en una publicación que, desde aquí, animo a todos destripar con mimo. En estas páginas están, seguro, muchas claves de los éxitos que estamos por vivir.
Gracias por contar con nosotros Ioana, también en el día de hoy y mucha suerte a todo el equipo editorial.